Instalar un cargador de vehículo eléctrico en un garaje comunitario
Al principio, la instalación puede parecer complicada, pero es más fácil de lo que parece.
En 2009 la modificación de la Ley de Propiedad Horizontal eliminó la necesidad de someter la instalación de un punto de recarga a la aprobación de la comunidad de propietarios: si deseas instalar una estación de carga en tu garaje, solo necesitas notificar por escrito al presidente o administrador de la comunidad: un informe será suficiente
El cargador se conectará directamente con el contador de tu vivienda para lo que será necesario realizar la instalación pertinente.
Ten en cuenta que, en algunos casos, las compañías eléctricas ofrecen la instalación común necesaria para todo el cableado, desde el cuarto de contadores a las plazas de garaje, con costes más económicos si es toda la Comunidad o gran parte de los propietarios quienes lo solicitan.
Para poder instalar un punto de recarga en un garaje comunitario, existen principalmente dos tipos de configuración:
¿Cómo hacer la instalación?
Si el garaje y la casa están en la misma comunidad. Las plazas de aparcamiento suelen estar situadas en el sótano de un edificio residencial. En este caso, las normas permiten el tendido de un cable desde el contador de la casa (la normativa exige que esté conectado directamente al contador) hasta el estacionamiento.
Esta es la mejor solución porque permite que la vivienda y el punto de recarga compartan el punto de suministro eléctrico (y la factura).
En caso de que el garaje se encuentre localizado en una propiedad diferente, tienes que solicitar a la distribuidora un nuevo punto de suministro (con un nuevo contador) y te verás obligado a tener otra factura eléctrica.
Aunque es posible conectar tu instalación al contador comunitario: esto requiere de autorización de la comunidad y es muy posible que no exista unanimidad en la otorgación del permiso, dado que el disfrute de un elemento en un espacio común que genere gastos a la comunidad puede no ser del agrado de quienes no dispongan todavía de un vehículo eléctrico.
¿Y si la instalación la hace toda la Comunidad?
Si se decide hacer una instalación comunitaria se deberá suministrar energía a cada punto de recarga desde el punto de suministro del garaje (el mismo que alimenta las zonas comunes). Esto requiere la instalación de medidores de electricidad secundarios para que la comunidad pueda pasar la factura mensual de electricidad al propietario del vehículo.
Si bien es la forma óptima (especialmente para un futuro con muchos puntos de carga), rara vez se usa en la práctica porque requiere el consentimiento de la comunidad, además de una plataforma para que los gastos se le pasen a cada vecino en función de su consumo.
Ten en cuenta que los requisitos técnicos para instalar un punto de recarga se recogen en la guía ITC-BT-52 para instalaciones a baja tensión, según aclara la Red Eléctrica de España.
En cualquier caso, y sea cual sea la solución adquirida, es preciso contar con un Certificado de Instalación Eléctrico CIE para proceder a dicha instalación, así como con la documentación complementaria requerida para llevar a cabo la instalación del cargador en un garaje de uso común.